El vinagre en este postre es la estrella. La sensación fría y ácida del helado transmite una experiencia realmente gourmet. El punto cítrico de la jalea y los frutos rojos contribuyen a resaltar todos los matices de la larga crianza del vinagre reserva.
Poner a calentar en fuego suave la leche, la nata, la leche en polvo y la dextrosa, subir a 40 ºC. Incorporar el azúcar y el neutro, calentar hasta los 80 ºC. Enfriar y añadir el vinagre. Batirlo todo y dejar reposo durante 8 horas. Mantecar y conservar a -20 ºC.
Para la jalea de naranja sanguina:
Cocer todos los ingredientes hasta alcanzar 105 ºC.
En el fondo de un plato hondo poner un poco de jalea de naranja, disponer los frutos rojos y hojas de menta picada. Terminar con la quenelle de helado de vinagre.